Técnica de Presión
Es una técnica antigua que data en parte de la cerámica Prehistórica, descubierta en distintos lugares.
Primero, se debe tener siempre una idea de lo que se desea crear y tambien sus posibles dimensiones.
Teniendo como idea el realizar una taza de café, tomamos un poco de arcilla elástica y amasamos de manera que la arcilla se compacte y no tenga ningun vacío de aire dentro para que no rompa la pieza al hornearla en su acabdo final.
Tomamos un puñado de arcilla y lo volvemos pelota o en forma redonda, y con nuestro pulgar hacemos presión en el centro de la arcilla para hundirla. Con ella vamos haciendo el espacio que vendría contener el liquido que vertiremos en él. Mientras vamos haciendo preción constante en el centro, vamos moldeando las paredes de la taza hacia arriba de manera que tenga altura nuestra taza.
Una véz obtenida la taza con la fomra de nuestra preferencia, dejamos secar un poco y una vez compacta nos concentramos en el acabado, en hacer que los bordes y los alrededores de la taza sean lo mejor acabado con nuestras manos o con la ayuda de paletas que le den un acabado más exacto.
Y así tendremos una taza de café o té, con la técnica de presión. Todo dependera de la presión que ejerzamos en la arcilla para que quede de igual grosor y dimensión en todos los puntos de la taza.
El siguiente paso ya vendrá con la creatividad que tenga el artesano, al ponerle o no una asa, o decorarla de la forma en que más guste.
Al realizar ponerle una asa, se toma un poco de arcilla y se aplana con los dedos haciendo presión, de manera que logremos que la arcilla tome una forma de banda. Despues visualizamos donde queramos poner el asa y hacemos un rallado cerca del borde superior de la taza con la ayuda de un Kemper (o algún objeto que corte y punzante) y cerca de la base de la taza.
Se realiza lo mismo en las puntas de la banda de arcilla que hicimos y pasamos a tomar el pegamento con el que se unen las piezas de arcilla, llamada Barbotina (una mezcla de arcilla diluida con agua dando una consistencia aguada). Y con un pincel untamos la barbotina en las puntas rayadas de la banda y el rayado de la taza.
Luego pegamos una punta de la banda en el rayado superior de la taza, y dejando un espacio como para que entre un dedo (que será como sostendrémos la taza en las manos al usarla) pegamos la otra banda en la parte inferior de la taza.
Dejamos secar para que se solidifique ambas piezas, y luego pasamos la pieza para el horneado y así en ese proceso obtener la pieza final.
Más allá de ser una técnica de pasos a seguir, es una cuestión de creatividad y de lo que desee el artesano al crear las piezas con sus manos.
